Para las personas con artritis es bueno hacer ejercicios
Aunque un entrenamiento intenso a menudo puede
agravar la inflamación articular, el ejercicio regular es una parte importante
para manejar la rigidez y el dolor crónico de la artritis. La clave está en
hacer ejercicios de baja intensidad, que no sólo ayuden a fortalecer los
músculos y mejorar la flexibilidad, sino que también puedan ayudar a reducir la
inflamación. Recuerde: no existe un régimen que le quede bien a todos. Quienes
sufren de artritis deben tomar especial cuidado para evitar ejercicios que puedan
golpear o sacudir las articulaciones afectadas.
Siempre consulte con un profesional de la salud
antes de comenzar cualquier rutina de ejercicios. Un fisioterapeuta puede
recomendarle ejercicios específicos para usted, en base a su capacidad y sus
necesidades. Puede enseñarle cómo realizar un seguimiento de su
progreso y ajustar sus ejercicios, según sea necesario.
La Arthritis Foundation recomienda tres
elementos para su rutina: ejercicios que mejoren la flexibilidad, ejercicios
que desarrollen la fuerza y los que aumenten su capacidad aeróbica.
Flexibilidad
El tai chi, el yoga
y los ejercicios de estiramiento son buenas maneras de aumentar el rango de
movimiento para muchas personas. Sin embargo, hay muchas rutinas de
estiramiento que puede realizar cada día en la comodidad de su propia casa.
Ejercicios de fortalecimiento
La inflamación de
las articulaciones y la falta de actividad física pueden debilitar los músculos
con el tiempo. Sin embargo, los ejercicios que desarrollan la fuerza muscular
pueden ayudar a reducir el dolor y la inflamación, al soportar las articulaciones
y protegerlas de golpes y lesiones.
Ejercicios aeróbicos
Al igual que con todas las nuevas rutinas de
ejercicio, comience con cuidado para aumentar gradualmente su ritmo cardíaco y
mejorar su resistencia y aguante. Considere formas básicas para aumentar su
ritmo cardíaco, como:
•
Caminar
• Montar en bicicleta - la mayoría de los médicos
recomiendan el uso de una bicicleta estacionaria
• Natación
• El movimiento y el ejercicio en agua caliente
Una vez más, es importante adaptar la rutina de
ejercicios a las necesidades y limitaciones específicas. Siempre consulte con su
médico antes de comenzar cualquier rutina de ejercicios.
¡¡Hasta
pronto!!
Fuente:Escrito
por Dean Haycock, Ph.D. en Biología de la Brown University. Tomado de:
http://www.livestrong.com/
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