HACIA UNA ENERGIA LIMPIA
El
calentamiento global, a consecuencia de la acumulación de gases de invernadero en nuestra
atmósfera, nos amenaza con el incremento de inundaciones, incendios forestales,
deshielo de glaciares, sequías, etc.
Hay que frenar el aumento de la temperatura
promedio en el planeta. Debemos detener el consumo de combustibles fósiles a la
mayor brevedad posible para reducir la emisión de CO2, nuestro mayor
problema.
Aún tenemos tiempo de
lograrlo, aunque cada vez menos.
Hoy día hay muchos proyectos que utilizan fuentes naturales de energía limpia. Destacan entre ellas, la energía solar, la eólica, la hidráulica. Se ha hecho grandes avances al respecto, aún son insuficientes.
Aumentar instalaciones puede ser una opción,
pero eso podría generar otros desequilibrios. Por ejemplo, sería necesario “invadir”
inmensas extensiones de terreno con celdas solares, afectando la flora y la
fauna del lugar. Instalar molinos de viento por doquier, pone en riesgo a las
aves. La energía hidráulica es la de menos
riesgos pero su aporte, aunque bastante grande, no es suficiente para todo lo
que se requiere.
Sin
embargo, en ese panorama tan exigente y con tantas restricciones, existe un proceso
que podría ser “la gran solución” como otra fuente de energía limpia: la
fusión nuclear.
Veamos
en que se diferencia este reactor de los conocidos reactores de fisión nuclear,
que se utilizan desde hace muchos años
La
fusión nuclear es la reacción que ocurre en las estrellas como el Sol. Acá, dos
elementos livianos (de bajo peso atómico) se unen para formar un elemento más
pesado. Con la fusión nuclear no se genera CO2 u otra emisión dañina a la atmósfera.
Además no habrá necesidad de
“cementerios de residuos peligrosos” pues el reactor solo produce helio,un gas inerte.
Mientras
que los reactores de fisión nuclear bombardean átomos pesados con neutrones, y
fragmentan su núcleo formando átomos más livianos, pero muy inestables. De ahí
su riesgo de radiación dañando todo a su alrededor.
La
energía producida en una central de fusión sería, además, altamente efectiva: con tan solo un gramo de materia, se puede obtener la
energía equivalente a la
combustión de 8 toneladas de petróleo. Además, se calcula que la fusión
podría generar entre tres y cuatro
veces más energía que
el proceso de fisión —que se utiliza actualmente en las centrales nucleares
existentes.
Este experimento, que debería comenzar en 2025, está
destinado a aportar la solución definitiva que elimine nuestra dependencia del
petróleo a partir de 2050.
Hasta pronto.
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