La Risoterapia Ayuda a Manejar el Estrés
Para
algunos, andar con la sonrisa de oreja a oreja, es algo que está reservado solo
para la gente “feliz”, aquella que no tiene ningún problema y que solo tiene
tiempo para disfrutar. Para otros, un risueño es un sinónimo de un ser
superfluo, liviano o simplemente de poca inteligencia (“la risa abunda en la
boca de los tontos”). ??
Estamos
en un mundo que siempre va de prisa, todos andamos siempre apurados y no
tenemos tiempo para nada, ni siquiera para hacer trabajar los músculos de la
cara. Quizás es por eso que muchos están convencidos de que reir está reservado
solo para algunos, para aquellos que
viven el presente, que tienen la capacidad de disfrutar y entender que ser
feliz es posible, aunque cueste.
Es por eso que decir: “reir es
necesario” no es algo antojadizo, sino muy cierto. Y es que soltar una
carcajada no solamente tiene relación con la felicidad, también con la salud y
el estilo de vida que cada uno lleva. Reir a diario es beneficioso para todo eso
e incluso para prevenir enfermedades.
Quizás por esa falta de risa que se
observa en nuestra sociedad es que se ha hecho necesario que haya grupos de
personas que se reunan para simplemente reir.
Puede sonar extraño, pero para aquellos que lo necesitan, unos pocos
minutos de risa al día son una verdadera terapia que les ayuda a ver la vida de
manera diferente.
El poder de la risa
Un
“docente en risoterapia”, el chileno Juan Antonio Salas cuenta que la risa tiene innumerables
beneficios: “produce aceleración del ritmo cardíaco y un aumento de entrada de
oxígeno al cerebro. También ayuda a reducir el estrés y a fortalecer el sistema
inmunológico ante cualquier enfermedad”.
Continúa el terapeuta diciendo que
en las investigaciones realizadas en torno a la risa, indican que “las personas
risueñas y con sentido del humor sufren un 40 % menos de infartos y logran
vivir al menos 4 años por encima de la media”. Aunque sea por sobrevivencia,
vale la pena reirse un poco más de lo usual.
Y aún quedan beneficios por citar!
El arte de reir estimula la secreción de sustancias bioquímicas, tales como
dopamina (neurotransmisor que eleva el estado de ánimo) y serotonina (con
propiedades analgésicas y calmantes), disminuye el cortisol (una de las
hormonas causantes del estrés), aumenta la inmunoglobulina A y la gamma-interferón (sustancias muy
importantes frente a las infecciones).
Una terapia basada en la risa
Los científicos que han estudiado el
tema, destacan lo notorio de los
cambios orgánicos que experimentan las
personas al reir. Eso bien puede utilizarse como tratamiento para pacientes que
necesitan por ejemplo, aumentar su apetito
o salir de una depresión.
Así ha surgido la risoterapia, como
técnica que utiliza las carcajadas para ayudar – de manera complementaria a la
medicina tradicional – a mejorar la salud y calidad de vida de las personas que
lo necesitan.
La risoterapia es calificada como
una estrategia y no como una terapia pues no cura por si misma. Es una ayuda
auxiliar, complementaria, preventiva y holística. Con este concepto se enfatiza
que no es posible curar enfermedades solo con el uso de la risa. Pero si es un
instrumento que ayuda a ver la vida con humor, desde el lado lúdico, positivo y
optimista.
Juan Antonio Salas agrega que la
utilización de la risa como apoyo terapéutico implica “una apertura hacia el
amor, el desarrollo personal, la comunicación y el autoconocimiento”, siendo
algunos de los padecimientos que trata “la depresión y tristeza, enfermedades
psicosomáticas, el insomnio (la risa produce un “descanso positivo” que invita
al sueño placentero), el miedo y la la timidez entre otros.
Para Juan Antonio, reirse de buena
gana es siempre posible, incluso en ciudades como en las que vivimos (que
siempre las vemos muy grises). “Es cosa
de detenerse y observar” sin dejarse llevar por las preocupaciones y dejando de
lado aquella risa “dañina” que se usa en desmedro de los demás. “El mundo está
plagado de comicidad y de juego, solo hay que estar en sintonía con la vida y
con el sentido de humor” asevera.
Existe también el yoga de la risa,
en el que las carcajadas se experimentan desde la persona en si. No se usan
recursos externos, sino las experiencias propias para hacer pasar por el cuerpo
la respiración y ejercicios de risa. Ya habrá más adelante, oportunidad para
compartir con usted amigo lector sobre
este tema.
Hasta
pronto!!
Fuente: Wikipedia
Comentarios
Publicar un comentario